Javier Milei reconoció que los salarios en Argentina son «miserables» y dijo que no hay plata para jubilados

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El presidente Javier Milei aseguró en una entrevista que es plenamente consciente de la situación de Argentina. «La mejora la estás viendo», afirmó.

El presidente Javier Milei afirmó que es plenamente consciente de la situación de crisis que vive la Argentina. «Lo que sucede es que corregir cien años de desastres no es gratis, en especial las aberraciones que se hicieron los últimos 20 años», justificó.

En una entrevista con Chiche Gelblung, el Presidente aseguró que la Argentina «se ha empobrecido» y reconoció que «tenemos salarios miserables». «En la convertibilidad el salario promedio en la Argentina era de 1800 dólares que a moneda de hoy sería el equivalente a 3000 dólares. Y sin embargo los salarios de hoy son de 600 dólares», sostuvo Milei.

Desde la Casa Rosada, el mandatario nacional culpó a la «estrategia populista de distorsionar los precios, exacerbar el consumo, castigar el ahorro y la inversión, que ha generado que hoy los salarios hayan perdido 80% respecto a lo que teníamos en términos de la convertibilidad en moneda constante».

Gelblung le preguntó por la situación de los jubilados, ya que según el INDEC la canasta básica total quintuplica la jubilación mínima. Al respecto, Javier Milei aseguró que «a los jubilados les aumentamos un 150 por ciento» el haber, en referencia a un supuesto bono de 200 mil pesos. Y relativizó la situación de los adultos mayores: «Argentina tiene poco más de 50% de pobres, en el segmento de los jubilados tiene 15% de pobres».

Luego, en otro tramo de la entrevista, ya con José Luis Espert a su lado, Milei retomó su clásico «no hay plata» para justificar el monto de la jubilación mínima. Fue primero el ex líder de Avanza Libertad quien señaló que no hay aumentos porque «todavía rige la fórmula de actualización vieja que el Congreso no quiso derogar».

Y luego Milei insistió en que «son las jubilaciones de un país que está empobrecido. Son las jubilaciones de un país que tiene 60% de pobres. Se empobreció todo, como consecuencia de eso se empobrecieron también los jubilados». Cuando Gelblung le señaló que los jubilados no tienen tiempo, el Presidente respondió: «está bien, pero no tengo plata, ¿con qué les pago?».

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